Hace unos cuantos meses me recomendaron visitar el antiguo Hospital Santa Creu i Sant Pau en Barcelona. Al buscar la dirección me sorprendió la cercanía al templo de la Sagrada Familia, uno de los más famosos al pensar en esta ciudad. ¡Qué gran guiño al diseño urbano!
Vista directa de la Sagrada Familia desde el antiguo hospital |
El acceso principal es por medio de una plaza esquinera |
El visitante atraviesa primero los pórticos de acceso y llega a una gran plaza esquinera. A su derecha, el acceso principal lleva al edificio administrativo donde lo que nos recibe es una tienda de souvenirs. La boletería está ubicada a un costado de esta tienda, lo cual resulta interesante porque la única ventana en la sala deja entrever un techo de tejas coloridas típicas de este complejo arquitectónico.
La insinuación que causa esta ventana indica que no entrar sería un error. Con esto me refiero a que la boletería no es lo primero que llegas a ver, sino que se percibe como un punto de chequeo necesario hasta llegar a lo interesante que está allí adentro. Convence. Seduce. Invita.
En este plano: Resaltan los 12 edificios que se construyeron respecto a los 36 pabellones del diseño original |
Este conjunto de curiosos edificios fue construido entre los años 1902 y 1930. La idea fue dotar a la ciudad de un nuevo hospital general que se alineara a los nuevos descubrimientos y recomendaciones de la época en cuanto a la higiene.
Las labores médicas en este hospital funcionaron hasta el año 2009 cuando se trasladó toda la actividad asistencial al nuevo hospital, ubicado en una propiedad contigua. Desde ese momento inició un proceso de remodelación y recuperación de los edificios de este conjunto conocido como "Recinto Modernista Sant Pau".
En la segunda sala del recorrido a visitar se encuentra una gran maqueta con los las edificaciones que sí llegaron ser construidas. En aquella época de inicios de Siglo XX era la pauta la distribución de los pacientes en pabellones separados: los convalecientes aparte de los pacientes contagiosos o post-quirúrgicos. Hombres separados de mujeres.
El Edificio Administrativo y la plaza esquinera del acceso principal (Maqueta de gran escala) |
La separación ajardinada entre pabellones (Maqueta de gran escala) |
Luego de la sala inicial con la gran maqueta se baja unos escalones y se llega a la Sala Hipóstila. Esta tiene suficiente altura pues en su momento se pensó que debía permitir el ingreso de carruajes y así fue construida.
La Sala Hipóstila sirve de acceso a los niveles subterráneos
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La Sala Hipóstila es preámbulo para los túneles que conectan cada uno de los pabellones. Estas galerías subterráneas fueron útiles para trasladar pacientes, medicamentos y la red de tuberías que hizo funcionar el hospital en sus días.
Túnel de servicio que une los diferentes pabellones del antiguo hospital. |
Luego de los túneles, el recorrido vuelve al nivel principal y sale a una gran plaza central. En esta plaza es posible encontrar un mapa-escultura, la cual indica los nombres de cada uno de los pabellones, incluida la Casa de Operaciones central.
Al centro: la Casa de Operaciones y los pabellones de pacientes convalecientes a su alrededor |
Mapa-escultura en la plaza central |
Al nivel de la plaza, los espacios entre pabellones están embellecidos con jardines, árboles y mobiliario.
El diseño continúa impresionando al conocer que las angostas torres en los extremos de cada pabellón fueron diseñadas para funcionar como depósito elevado para la distribución de agua. Es esta una genialidad que pasa desapercibida.
Vista de los pabellones desde el Edificio Administrativo. |
Los jardines entre pabellones |
Si nos adentramos en temas de accesibilidad, es curiosa la manera en que todos los edificios de este antiguo hospital fueron diseñados con rampas integradas a la forma y el lenguaje modernista imperante.
Los pabellones se diseñaron elevados sobre el nivel del terreno para garantizar la ventilación del espacio. |
Todos los accesos están garantizados por una rampa integrada al edificio. |
Actualmente, la mayoría de los pabellones donde estuvieron las camas de hospital están ocupados por oficinas de desarrollo cultural. Es aquí donde la reflexión lleva a pensar que aunque un proyecto cambie de uso, gracias a la belleza y el diseño arquitectónico, éste puede seguir contribuyendo a mejorar la calidad de vida de una sociedad.
Exhibición temporal en uno de los pabellones abiertos al público |
Una fotografía de gran formato permite hacerse la idea de cómo funcionaron las camas de hospital |
Detalle de las ventanas que servían a cada una de las camas de hospital |
La visita continúa ingresando a una de las pequeñas edificaciones al costado del conjunto arquitectónico. Este punto reúne fotografías y textos que muestran el estado previo de todo el hospital y el proceso de remodelación al que fue sometido.
El proceso de reforma incluyó la recuperación de las fachadas. Por ejemplo: la eliminación de todos los equipos de aire acondicionado y otras instalaciones. |
La última edificación a la que es posible acceder es el edificio administrativo. Este ofrece un gran vestíbulo de doble altura, acompañado de enchapes, escaleras, ventanas amplias y bóvedas, todas con un altísimo nivel de detalle.
Vista del Edificio Administrativo desde la plaza central |
Vestíbulo del Edificio Administrativo |
Pasillo en una de las alas laterales del Edificio Administrativo |
Al salir de este gran lugar queda una gran sensación de satisfacción a todos los que amamos la arquitectura y la complejidad de los hospitales.
En su momento, el arquitecto Lluis Domenech i Montaner, el gran benefactor y banquero Paul Gil y las diversas comisiones técnicas que dictaron las pautas de cómo debía construirse este hospital catalán jamás se imaginaron que su buen trabajo en obra privada terminara como gran legado para toda una ciudad. No por nada fue declarado este conjunto Patrimonio Mundial en el año 1997 por parte de la Unesco.
En su momento, el arquitecto Lluis Domenech i Montaner, el gran benefactor y banquero Paul Gil y las diversas comisiones técnicas que dictaron las pautas de cómo debía construirse este hospital catalán jamás se imaginaron que su buen trabajo en obra privada terminara como gran legado para toda una ciudad. No por nada fue declarado este conjunto Patrimonio Mundial en el año 1997 por parte de la Unesco.
Vista desde el techo del Edificio Administrativo. Al fondo: el nuevo hospital. |
Gracias Barcelona por mostrar un hospital diferente, lleno de luz e increíbles detalles |